EFICIENCIA ENERGETICA

Cuando hablamos de Eficiencia energética, nos referimos al uso de los recursos energéticos en su máxima expresión para su aprovechamiento o uso con una perdida mínima en eficacia como resultado.

En este apartado podemos hablar de:

• Análisis de factura eléctrica, optimización  de consumos.
• Análisis de repartición de potencias para el equilibrio de la facturación.
• Análisis de usabilidad de los sistemas y coordinación de los mismos

Tanto en Edificación como en Industria, se invierte en aparatos, máquinas que consumen energía y que ya son de por si eficientes, pero a veces la convivencia de los mismos si no se planifica puede dar un resultado no óptimo hablando en términos de Eficiencia. por ello es imprescindible, identificar, localizar y coordinar el servicio energético y uso con el fin de conseguir un equilibrio óptimo entre energía aprovechada y gasto.

En este apartado, una de las energías más desaprovechadas por el mal uso que se hace de ella es la lumínica,  queremos hacer hincapié en la tecnología LED como solución a la eficiencia y eficacia real en iluminación, donde EGONDO, S.A. se ha especializado para asesorar a sus clientes.

No dude en ponerse en contacto con nosotros para un estudio personalizado.

Podemos afirmar en pocas líneas, las ventajas de instalar y optar por la tecnología LED, principal se puede resumir en estos diferentes apartados.

1. Fundamentos del por qué eficiencia = ahorro.
2. Bases técnicas del por qué decidirnos por el sistema LED, frente a los sistemas actuales.
3. Rentabilidad y amortización de la inversión.
4. Protección del medio ambiente.
5. Posibilidades de ampliación y modificación de la línea de negocio.

El fundamento principal de la eficiencia lumínica, es el aprovechamiento máximo de la energía convertida en luz, con la tecnología Led conseguimos un aprovechamiento del casi 100% por lo que este aprovechamiento se convierte en rendimiento lumínico, por lo que conseguimos un ahorro importante al no tener pérdidas de energía en la generación de luz, como sucede en otras tecnologías, como la fluorescencia o con los halogenuros metálicos, llegando a una perdida en conversión del 30%.

Por lo que podemos afirmar, que eficiencia es igual a ahorro, pero además es igual a seguridad, con un coste menor. 

Hasta hace pocos años, cuando nos teníamos que decidir por un sistema de iluminación, no teníamos demasiadas opciones, y no podíamos realizar una gestión adecuada  de esta luz, hablamos de superficies industriales en las que en su mayoría se utiliza luz de halogenuros  o fluorescencia.

Cuando hablamos de halogenuros, tenemos que contar con un desaprovechamiento lumínico del 30% por pérdida, además de un 10% por pérdida de calor, tenemos que tener en cuenta el tiempo de arrancado de la lámpara, y en caso de ser apagada, necesita un tiempo para restablecer servicio, por lo que a veces nos obliga a tener el alumbrado durante horas encendido aunque apenas se transite por la zona, léase zonas de almacenaje, tránsito peatonal, etc.

Además al disponer de arrancador, en el caso de querer reproducir demasiados arranques, este arrancador se avería en un tiempo determinado.

Cuando nos enfrentamos a un estudio de rentabilidad de  la inversión o de amortización, ante una instalación de iluminación por Led, aunque las comparativas a veces no son fiables, sin embargo necesarias, por lo que destacaríamos los siguientes puntos:

• Eficacia lumínica: casi un 100% de la energía consumida, convertida en luz frente a un 70% del Halogenuro metálico (HM), y un 85 de la fluorescencia.
• Eficiencia lumínica: una mejor y mayor área concreta de iluminación, con una potencia menor de consumo, frente a la necesidad de una mayor potencia por parte de los H.M. y FLuo, para conseguir el mismo o similar resultado. Hablamos de +/- 40% de ahorro en consumo.
• Gestión lumínica: una gestión instantánea de la luz, pudiendo gestionar el encendido, cuando se necesita específicamente con cualquiera de los sistemas existentes en el mercado, así como detección de presencia, o graduación de luz en función de la luz del día, barreras, etc. Empleando la cantidad de energía justa y necesaria, frente a una deficiente gestión posible de la iluminación de los H.M. y Fluo, limitados por la cantidad de arranques(Fluo) y con un tiempo de encendido y apagado que requiere de un enfriamiento previo que suele alternar en intervalos necesarios de entre 5 y 15 minutos.
• Mantenimiento, por su constitución técnica y construcción, la durabilidad del Led es casi 10 veces mayor a la lámpara de H.M y casi 8 veces mayor a la de Fluo, lo que se traduce en un menor mantenimiento, además de la menor perdida de luxes por desgaste, afectando positivamente al mantenimiento de los equipos. Además de la recomendación ensayada de emplear equipos de LED de alta potencia en ambientes industriales, al tener una alta resistividad en entornos con vibraciones.

Con todo ello se realiza un cuadro aproximado de amortización, ya que todos los puntos anteriormente descritos, entran por consiguiente en el cuadro de amortización, afectando al periodo, no obstante la valoración de los puntos de gestión y mantenimiento siempre es subjetiva, al uso, por lo que en el estudio de amortización lo omitimos, pero son puntos muy  a tener en cuenta, que traducido a Euros, nos disminuiría el plazo de amortización, considerablemente.

Cuando tenemos que valorar él como una marca de un producto o su proceso de fabricación o su funcionamiento afecta sobre el medio ambiente, nos tenemos que basar en los siguientes datos:

-          Niveles de contaminación por la creación de los materiales necesarios para la construcción física del producto.

-          Niveles de contaminación por su traslado según donde son fabricados y empleados.

-          Niveles de contaminación por su funcionamiento, al convertir la energía en luz, además de las emisiones por calor de CO.

-          Niveles de contaminación lumínica en el caso de iluminación en intemperie.

Todos estos puntos se reflejan en los datos que el propio fabricante específica, y que afectan en aranceles al precio final como penalización en función del nivel de puntuación.

Podemos afirmar que en el caso de la tecnología LED y por la proximidad con el fabricante, los niveles de contaminación son mínimos y la protección del medio ambiente de este producto está garantizada, ya que los LED de alta potencia no contienen mercurio ni gases tóxicos y están libres de plomo, cumpliendo con las más exigentes normativas RoHS y WEEE, y contribuyendo a la preservación del medio ambiente.

Además de una ausencia de radiaciones IR y UV, la radiación generada por el LED es únicamente luz visible, por lo que no emite radiación ultravioleta ni infrarroja, al contrario que las lámparas incandescentes, fluorescentes o de descarga. Debido a esta característica, la radiación que emiten los LED no produce calentamiento ni deterioro de los objetos que ilumina.

Cuando tenemos que analizar las posibilidades de una nave a la hora de ser instalada, en el caso de sufrir modificaciones o ampliaciones de zonas de almacenaje o producción o exposición, pudiendo ser necesario la orientación o movilidad de la luz para el nuevo fin, con la nueva tecnología de LED de alta potencia, y su diseño omnidireccional, y con las posibilidades de cambio de óptica en apertura de grados desde los 15º hasta los 150º gran respuesta en grandes alturas hasta los 16 mts., y combinación de color con posibilidad de graduar este en blancos de diferentes K, y en color si fuese necesario, todo ello en alta potencia.

Con lo que concluimos que la elección del LED de alta potencia, es una elección que nos da una versatilidad de uso y rendimiento más amplio que el resto de sistemas existentes en el mercado.

6.    Recomendaciones.

Como punto final podemos reducir a unas líneas la justificación de invertir en la instalación de este producto, ya que las inversiones en aquellas empresas en las que se utilice la luz durante un turno de 8 horas/día o más turnos, el plazo de amortización varía entre 4 a 6 años, si hablamos de números puros y duros, ya que habría que sumar los números traducidos de los demás puntos de ventajas descritas anteriormente. Una vez terminado este plazo, como todavía no reinvertimos en altas reparaciones y mantenimiento del sistema, podemos contar con un ahorro similar al 80% de la inversión en los siguientes años.

Como podemos observar, estamos hablando de números, ya que los demás campos están cubiertos, hablamos de seguridad laboral, rendimiento, eficiencia y eficacia, lumínica. Nunca hasta ahora se podía hablar en estas dimensiones  de coste y funcionalidad.